Las Comunidades Autónomas que mejor protegen la naturaleza
Un análisis realizado por WWF en España pone de manifiesto las deficiencias o los aciertos en la gestión de la protección de la naturaleza en las distintas Comunidades Autónomas. Según estos datos, País Vasco y Baleares encabezan la lista como las CCAA que mejor protegen la naturaleza. Las más deficientes son Galicia, Andalucía, Cantabria y Madrid.
Nota a las Comunidades Autónomas por su protección de la naturaleza
El «Naturómetro» obtenido a partir de los análisis realizados por WWF establece una clasificación de las Comunidades Autónomas apuntando a criterios de eficacia de los planes de gestión medioambiental. En concreto, se han estudiado 312 planes de gestión de la Red Natura 2000 en España –tanto aprobados como pendientes de aprobación–, que suponen el 22% de los planes de gestión de los LIC (Lugares de Importancia Comunitaria).
Encabeza la lista con buenas puntuaciones el País Vasco, y en el segundo puesto se encuentran las Islas Baleares. A continuación se sitúan la Comunidad Valenciana y La Rioja.
Estas CCAA destacan por planes de gestión capaces de detectar correctamente las amenazas y de presentar medidas adecuadas de conservación, además de especificar fuentes de financiación que permitan afrontar este tipo de actuaciones.
En la lista de suspensos encontramos a Galicia, Andalucía, Cantabria y Madrid, y también «en una situación grave» se encuentran los planes de Castilla y León, Murcia y Asturias, por fallar en la definición de objetivos de conservación aplicables a todos los habitats y a todas las especies. Además, las medidas para aplicar están redactadas sin suficiente concreción y sin un presupuesto calculado al detalle.
En las posiciones intermedias, con una calificación de «aceptable, pero necesita mejorar» se encuentran las Comunidades Autónomas de Cataluña, Aragón, Canarias, Navarra, Castilla-La Mancha y Extremadura.
En palabras de Gema Rodríguez, responsable de la Red Natura 2000 de WWF en España, es inaceptable que en espacios donde se dispone de información tan abundante sobre las condiciones de los ecosistemas se establezcan objetivos tan ambiguos y poco ambiciosos.
Fuente: Ecoticias
