Procariotas, los primeros organismos vivos

Desde el punto de vista evolutivo, los procariotas son el grupo de organismos más antiguos sobre la Tierra. Además, a pesar de su relativa simplicidad, los procariotas contemporáneos son los organismos más abundantes del mundo. Aunque existen dificultades para definir las especies procarióticas sin ambigüedades, se conocen actualmente unas 2700 especies distintas. Los procariotas son los organismos celulares más pequeños: un gramo de suelo fértil puede contener hasta 2500 millones de individuos.

Dentro de este grupo de organismos encontramos seres unicelulares, básicamente bacterias, aunque no todas. Sin embargo los virus no tienen una clasificación sencilla y aún genera mucha controversia. Es debido a que no se pueden reproducir por si mismos, con lo que no están considerados como seres vivos sensu stricto.

Célula procariota
Célula procariota

Éxito adaptativo de los procariotas

El éxito de los procariotas, biológicamente hablando, se debe indudablemente a su gran diversidad metabólica y a su rápido ritmo de división celular. En condiciones óptimas, una población de Escherichia coli – probablemente el procariota mejor conocido- puede duplicar su tamaño cada 20 minutos.

Los procariotas pueden sobrevivir en muchos ambientes que no toleran otras formas de vida. Se han encontrado en las extensiones heladas de la Antártida, en las oscuras profundidades del océano y hasta en las aguas casi hirvientes de las fuentes termales naturales.

Algunos procariotas están entre los muy pocos organismos modernos que pueden sobrevivir sin oxígeno libre, obteniendo su energía por procesos anaeróbios (obtención de energía por la célula en ausencia de oxígeno). El oxígeno es letal para algunos tipos (anaerobios obligados), mientras que otros pueden existir con o sin él (anaerobios facultativos).

Esporas

Espora
Espora

Cuando las condiciones son desfavorables, algunos tipos de procariotas pueden formar esporas de paredes gruesas. Estas esporas son formas  resistentes, inactivas. Permiten a las células sobrevivir durante largos períodos sin agua o nutrientes o en condiciones de extremo calor o frío. Pueden permanecer latentes durante años y algunas se mantienen viables aún cuando se las hierve en agua durante varias horas.

Afectación ecológica de los protistas

Desde un punto de vista ecológico, los procariotas son los más importantes como descomponedores. Degradan material orgánico a formas que pueden ser utilizadas por las plantas. Desempeñan también en papel principal en el proceso conocido como fijación del nitrógeno. El gas nitrógeno (N2) se reduce a amoniaco (NH3) o a ion amonio (NH4+). Aunque el nitrógeno abunda en la atmósfera, los eucariotas (células con núcleo) no son capaces de utilizar el nitrógeno atmosférico.  Así, el primer paso crucial en la incorporación del nitrógeno a los compuestos orgánicos depende principalmente de ciertas especies de procariotas. Algunas de estas especies son de vida libre, mientras que a otras se las encuentra solamente en íntima asociación con plantas.

Algunos procariotas son fotosintéticos y unas pocas especies son a la ves fotosintéticas y fijadoras de nitrógeno.

 

Fuente: Biología. Curtis & Barnes.