Divulgación científica, una profesión con futuro

La divulgación seguramente sea una de las asignaturas pendientes que tenemos aquellos que nos dedicamos a la ciencia. Y nos referimos con divulgación, concretamente la científica, al conjunto de actividades que interpretan y hacen accesible el conocimiento científico a la sociedad. La divulgación científica pone su interés no solo en los descubrimientos del momento (por ejemplo, el descubrimiento de nuevas técnicas biotecnológicas). También lo hace en teorías más o menos bien establecidas o aceptadas socialmente (por ejemplo, la teoría de la evolución). Incluso en campos enteros del conocimiento científico.

Sin embargo, hay que dejar claro que no todo es divulgación científica. Ni que todos valemos para ello. Es común que los científicos «hagamos» divulgación que sólo entendemos entre nosotros. No somos conscientes de la cantidad de información que lleva cada palabra y que el resto de la población no va a entender. Esto ocurre también entre distintas ciencias, e incluso dentro de la biología. Un genetista y un entomólogo difícilmente se entenderán después de unos años de terminados los estudios.

La divulgación científica en el mundo online

Como ya hemos comentado, la divulgación científica son todas aquellas labores que llevan el conocimiento científico a las personas interesadas en entender o informarse sobre ese tipo de conocimiento. Hace unos años, la labor del divulgador científico era ingente, debido a que la manera de llegar a la sociedad civil era a través de reportajes, documentales y libros o revistas. Esto limitaba mucho el hecho de la divulgación, puesto que los costes asociados a la misma eran muy elevados.

 

Actualmente, gracias a la revolución que internet ha supuesto para nuestra manera de comunicarnos y de transmitir la información, la divulgación científica ha adquirido una potencialidad sin parangón.

Existen casos exitosos de divulgadores científicos en diferentes redes sociales, como YouTube, Twitter o Instagram, que tienen miles de seguidores. Y los tenemos de todas las temáticas que se nos puedan ocurrir: biología, neurociencia, física, matemáticas, geología, el clima, etc. Actualmente es prácticamente gratuito poder ser un divulgador científico de éxito. Lo único que hace falta es tener gancho con el público. Y explicar las cosas para que las entiendan personas que no tienen nada que ver con nuestra profesión ni estudios.

Muchos de estos divulgadores han hecho de esto su profesión. Es decir, se ganan la vida con la divulgación científica. Empezaron de una manera altruista y con algún objetivo social, como ayudar a los alumnos de secundaria a entender las matemáticas, y actualmente están monetizando la actividad.